lunes, 2 de diciembre de 2019

Lo que sé de las mujeres




No es lo mismo. Yo tuve conciencia de los derechos y abusos de las mujeres a través de las mujeres con las que conviví desde hace muchos años. Ellas me confrontaron, hice el ridículo (después lo vi), sus pláticas me obligaron a pensar, me recomendaron libros y aún con toda mi formación machista de raíz, me aceptaron. Todo esto no se aprende en una peda con los amigos, se aprende en un café, en escuchar la vida de ellas, en ratos de intimidad, que puede ser la amistad que confía.

Muchas veces la cagué, con errores que hoy me parecen básicos, de primaria, hice daño, por soberbio y por pendejo (¿les suena familiar?), otras veces fui el compañero, el que acompañó, pero a mí lo que me pasó es que me enseñaron, al mostrarme sus heridas me mostraron un espejo.

Más del 90 por ciento, aunque no lo anduvieran cantando por la calle, sufrieron abusos y puedo decir que en todos los casos, por alguien cercano a ellas, como quien en su tiempo fue su pareja, o un familiar. Casi que en todas las historias que conozco hay un sujeto que ahorita debería estar en la cárcel. Y no lo está.

No estoy denostando a todo el género masculino, por ahí veo a varios, a algunos, que desde que los conozco me parecen respetuosos (creo que esa es la palabra clave en esta reflexión). Un día voy a escribir mi explicación de esto del respeto donde diré que nosotros hemos aprendido que mostrar un excesivo respeto, especialmente en privado, eso la sociedad lo asocia a comportamientos "poco masculinos".

Pero la mayoría tenemos problemas para aceptar que el respeto debería ser lo habitual, lo cotidiano.

Comencé a tener conciencia de los abusos a través de ellas. No porque yo haya sufrido abusos por el sexo opuesto, o sólo por ser varón. No. Ellas han enfrentado esto en carne propia, y no es lo mismo. Nunca va a ser lo mismo.

Me alegro de tener amigos y conocidos que sé que respetan; para el mundo, al menos para la gente de su entorno, eso es una tranquilidad.

martes, 19 de noviembre de 2019

Día del Hombre








Soy un varón adulto con educación profesional que vive en una ciudad con un alto nivel de vida
(Índice de Desarrollo Humano, le llaman). De hecho, vivo en un municipio que está en el sexto sitio más alto de IDH en México.

Todo esto significa que pertenezco a una clase privilegiada. Bastante, de hecho.

Por ejemplo, nunca me ha dado temor salir a altas horas ni he sentido ni siquiera el menor indicio de acoso por parte de personas del sexo contrario.
Tampoco he tenido que hacer doble jornada de forma permanente ni enfrentar muchos factores de discriminación.
Nunca he pensado en la forma en que voy vestido dependiendo del lugar y la hora, en razón de mi mayor tranquilidad.
Nunca me ha tocado ni he sentido que la persona del sexo opuesto gane más por el mismo trabajo desempeñado.

Soy privilegiado.

Nosotros, los varones heterosexuales y con formación somos tradicionalmente el patrón, el rasero, el punto de vista de la sociedad. 

Los otros, los que no son como nosotros, son lo otro de la sociedad y de la cultura. Nosotros definimos quiénes son los otros (alteridad, le llaman también). Les enumero abajo quiénes son los otros.
Ellos sí tienen que marchar, que exigir, que alzar la voz. No nosotros. A nosotros nos toca escuchar, aprender y si acaso acompañar.

Cuando seamos conscientes de cuántos privilegios gozamos los varones podremos ser un poco más empáticos, más respetuosos y acaso más justos.

La lista de los otros en la sociedad, incluye a:

Mujeres

Menores

Homosexuales

Personas de origen indígena

Personas de raza negra

Personas discapacitadas que no cuentan con apoyos

Personas de la tercera edad

Personas en situación de pobreza

Personas con enfermedades crónicas, degenerativas o terminales




lunes, 18 de noviembre de 2019

La Mirada

Qué sería del cuerpo sin la mirada

Una entidad sin forma
Presencia sin color
Mayor espacio para razones
Paisaje insípido

Mas la mirada, esa tirana,
nos tatúa un relato tras los párpados
y nos hace repetírnoslo
Con dolor con saña

El cuerpo crea su mirada
Sierva leal

Pero el cuerpo nada es sin la mirada

(25 de sept 2016).



domingo, 3 de noviembre de 2019

Rocío

En enero del 2003 me hospedaba en la colonia Roma de la Ciudad de México, en la casa de un amigo que trabajaba en el Gobierno de la Ciudad como abogado. De muy pocas palabras, un día antes de salir, mi amigo comentó que iba a un funeral. Al día siguiente me enteré que había fallecido Rocío Beltrán Medina, esposa del entonces Jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador. (curiosamente la señora Beltrán murió el día 12 y su esposa Beatriz cumple años el 13).

Hoy que veo un video de Andrés Manuel recordando a la esposa fallecida me doy cuenta que han pasado casi 17 años desde entonces. Y que nuestros muertos no envejecen. Me refiero ahora a mis familiares fallecidos. No conocí a la señora Beltrán Medina, pero 24 años de matrimonio fueron un rato. Hoy, por primera vez en la vida, sentí la profunda inquietud de elaborar un altar de muerto. Quizá el siguiente año, o el otro. Como toda cuestión íntima, uno sabrá cuándo. Muchas gracias.

viernes, 25 de octubre de 2019

La educación de los hijos y la educación de los padres






Esto he observado: Las virtudes de los padres no garantizan el tipo de desempeño de los hijos. Sí influyen mucho, el ejemplo marca, por supuesto, pero los hijos son (somos) personas en contextos y épocas distintas. La educación de los hijos es más importante que la educación de los padres.

martes, 22 de octubre de 2019

¿A favor del aborto?¿Contra la violencia de género?: Aquí va una propuesta de razonamiento




Un buen ejercicio es el siguiente: Ante una polémica sobre un tema político, una nueva ley o una decisión de gobierno, hacer una separación. esa división consiste en separar lo individual de lo social, es decir: 1) qué postura me orilla adoptar si tal decisión me llega a afectar o beneficiar a mí o a mi familia y, por otro lado, definir si esa es la mejor opción para la sociedad o comunidad, es decir, si esa postura política no perjudica las libertades y derechos de las otras partes involucradas y la forma en que puedan coexistir, o sea, cómo garantizar el mínimo respeto a esas partes que no necesariamente piensan como yo, con mis creencias, prejuicios, y valores.
Un ejemplo muy simplón. No soy una persona religiosa y tengo mis razones, pero no buscaría ni firmaría una propuesta para que cerraran las expresiones de culto en su versión a, b, c, y d, da lo mismo cuáles. Lo mismo para una opción política determinada. 


Cuando nos preguntan, o cuando queremos opinar sobre un tema polémico ¿hablamos desde un punto personal sobre lo que haríamos si estuviéramos en determinada circunstancia? Si es así, es válido, pero hay que aclararlo. Pero pensemos un poco más allá y pensemos en grupo, en sociedad. ¿La otra postura atropella mis derechos o simplemente me cae mal que el otro le vaya al equipo contrario?

Una cosa es que a mí en lo personal no la trague, y otra muy distinta es que yo exija que esa opción desaparezca de la faz de la Tierra. Separar lo individual de lo social. Así con el tema del aborto, los taxistas, los objetores de conciencia, el tema de la violencia de género, etc.

martes, 1 de octubre de 2019

Roberto




La amistad es una, pero cada amigo tiene su estilo. La amistad es sencilla y simple, pero cada amigo tiene su perfil. Si además de ser amigos encierran cierta sabiduría, entonces el goce es mayúsculo, un espectáculo de la vida. A veces hago todo por volver a lo simple, a veces me sale. Pero cuando no me sale, recuerdo que nadie como Roberto para la amistad transparente. La amistad es un vaso con agua que se hizo amiga del aire y de la gravedad. Entonces hay que escribir una carta, poner una cumbia o leer con gula. Para lo demás, está Roberto.


La sabiduría de mi amigo Roberto es única.
Cuando una pareja se separa siempre piensa que es para bien, y sigue hablando de la vida.
Si una pareja se consolida, siempre piensa que es para bien, sonríe, se alegra, y sigue hablando de la bonita vida.

Si un ser muy muy querido cumple años, le regala un libro.
No que le compre un libro y se lo regale, no. Le produce, hace un libro con los pensamientos y mensajes de 80 o 100 personas para la persona festejada, algunos de ellos perdidos por años.
Él los halla, les pide un mensaje y elabora con ellos el libro.
El día del aniversario, se lo pone al festejado en la mesa.
Edita cien o doscientos ejemplares, luego los envía a casa de cada uno de los colaboradores, firmados por la persona festejada (yo tengo dos).

Roberto viaja muchísimo, viaja como si fuera su paseo cotidiano, pero su tesoro no son los viajes, creo que su más grande vocación de la vida es honrar la amistad.
Deduzco que tiene grandes amistades, no porque me hable mucho de ellas, sino porque lo conozco a él.

Sabe que me gustan los aviones, por eso cada vez que está por abordar, me manda un mensaje de voz y me cuenta a dónde va.

Un día le pedí un recuento para un artículo que le hice para el periódico.
Le pregunté cuántos países había visitado.
Lo hice contarlos.
Una semana después me dijo 40, creo que 41, no recuerdo bien.

A veces me manda fotos de los lugares que visita y eso me hace sentir especial.
Cuando está a punto de abordar,  me dice qué avión es y si yo no lo conozco, lo busco rápido en Google y le doy algunos datos técnicos de la aeronave.
Si es un Airbus 319 sabré que los asientos serán más apretados y que tendrá 24 filas o a veces hasta 27, según la mañosidad de la empresa.

Cuando viene a Monterrey me avisa para comer y vernos, casi siempre en su hotel.
Es un sibarita consumado, pero paradójicamente, es de las personas más sencillas que he conocido.
Ah, también es poeta, creo que tendré 22 de sus 28 ó 30 libros de poesía suyos.

A veces me escribe cartas. Últimamente las cartas me llegan por correo electrónico.

Roberto me muestra cómo es la vida de sencilla. Jamás le he oído quejarse,
pero es que la vida no se trata de quejarse. Debe ser eso.
Nada de quejas.
Nunca.

La sabiduría de Roberto es única.

Yo también, cuando tenga 73 años como él ahora, quiero seguir escribiendo cartas a las personas que son especiales para mí.

Quizá no tenga tantos libros publicados, pero tendré presente que la amistad es sencilla,
y se cultiva.

Cuando tengo alguna dificultad, a veces me acuerdo de él.

Todo pasa, todo es temporal.

La sabiduría de Roberto es única.

lunes, 30 de septiembre de 2019

Hoy cerraron el Penal del Topo Chico, románticos





Hoy cerraron el Penal del Topo Chico después de 76 años de creado. ¿Cuántas personas que hoy vemos por ahí, en cualquier sitio, podrán rememorar los días en los que pasó dentro de sus paredes? ¿Cuántos llevarán a sus seres queridos y les explicarán dónde estaba cada espacio?
Sólo los más nostálgicos, los de un romanticismo más puro, (acorde a una tarde de otoño como esta), podrán recordar de qué color son los Ceresos. Sin hacer más comentarios somos novios.

sábado, 28 de septiembre de 2019

De cómo hablamos de la expareja





Hay personas que hablan mal de su expareja como si hubieran estado secuestradas y bajo tortura. 
No se acuerdan que en aquel momento eran un tipo de persona (otro tipo de persona distinta a la actual) que preferían (incluso amaban) a esa pareja, a esa persona que en aquel entonces era a lo mejorcito que podían aspirar. 

Hablar de la expareja es hablar de uno mismo.

Es mejor el agradecimiento, porque en aprendizaje a todos nos ha ido bastante bien ¿qué no?

Estoy agradecido por lo que me han reprochado, porque tenían razón. Agradecido por el tiempo. Agradecido por el amor que me dieron en su momento, porque fue muy bello.

En gran medida no sería el que soy si no me hubieran dado grandes lecciones de vida. 

jueves, 26 de septiembre de 2019

Inteligencia, ese lujoso platillo





Si me preguntaran qué cualidad aprecio más en una persona contestaría que la libertad, la libertad individual, la libertad de elegir en qué creer pero también la libertad de movilidad.

La segunda característica humana más valorada por mí es la perseverancia. Para expresar cuánto la valoro la pondré en perspectiva.

Cuando era muy joven, la inteligencia me deslumbraba, me apasionaba. La inteligencia era el instrumento por el que se podía acceder a la comprensión del mundo. Sigo pensando eso, sólo que la vida me ha mostrado otra cara.

La mayoría de las personas brillantes que he conocido pertenecen a uno o más de los siguientes rubros.

a) Les es casi imposible vivir sanamente en sociedad (léase, en pareja).
b) Han estado cerca o deberían estar en el manicomio.
c) Deberían estar en la cárcel.

Las poquísimas personas que considero brillantes y al mismo tiempo perseverantes, me parecen valiosas no por ninguna de las dos anteriores en especial, sino por su rectitud moral, por el profundo respeto que tienen con sus semejantes, por su generosidad.

Hago un recuento.
Observo los últimos 25 años. Las personas que están dando la pelea, que han crecido en su profesión, vocación, oficio, son en primer sitio las personas perseverantes. Qué tan inteligentes son... la verdad eso ya no me interesa mucho.

Hay en la perseverancia una concentración de salud, compromiso, ambición. La perseverancia es la única capaz de mantener el amor, la salud y el ingreso económico.

La inteligencia es un platillo escaso, exquisito pero que para nada es garantía de llegar a buen puerto.

He visto a las inteligencias más profundas de mi generación perderse en el olvido, en la abulia, en el autoabandono.



sábado, 21 de septiembre de 2019

Don Hesiquio Treviño Calderón

Hace unos años publiqué una reseña. El autor era un empresario veterano que, luego de retirado, se dedicó a investigar, se dedicó a la labor de historiador y sus contribuciones han sido importantes para la ciudad de Ensenada.. Fallecido hace como 20 años este libro fue reeditado. En un párrafo, dije del libro: "Su autor, don Hesiquio Treviño Calderón, pertenece a la estirpe de empresarios que no concibe el desarrollo económico sin el desarrollo humano y su reflejo en la sociedad en todos sus aspectos. Fallecido en 1999, tuvo sin duda ese motor aventurero como un Rodríguez Cabrillo y la visión humanista de don Eugenio Garza Sada, quizá el empresario y filántropo más importante que dio el siglo 20 mexicano".
El hijo de don Hesiquio, el ingeniero Treviño, es un hombretón de 1.80, regio Ex a tec, empresario y con mucho de la escuela de su padre. El ingenierio Treviño,además de exitoso empresario por décadas, era el dueño del periódico para el que yo trabajaba pero rara vez crucé palabra con él. Era muy parco, y con fama de ser muy honesto, muy derecho. Señalaba los rumbos, tomaba decisiones y siempre rechazó los cañonazos de 50 mil que ciertos políticos le ofrecían.
Mis compañeros, algunos grandes veteranos en el periodismo, sabían que las cosas no se discutían demasiado, sólo se hacían, y se hacían de la forma correcta, punto.
Prácticamente todos dejaban el alma por la empresa y su desempeño era de una entrega total. Qué esperanzas que el ingeniero Treviño diera una palmadita a alguno, mucho menos un elogio, porque siempre había un "pero".
Por eso me sorprendió que me llamara por teléfono el lunes siguiente de la publicación de la reseña. Cuando escuché su voz preguntando por mí. de pronto me vi en la calle. Algo malo motivaba esa llamada. Pero no, hablaba para decirme que le había gustado mi texto, que había sido muy acertado, y yo lo tomé como una felicitación. Fue significativa para mí aquella llamada, (a nadie de mis compañeros les había pasado algo parecido. Nunca.).
Y ni ellos ni yo entendíamos cómo el ingeniero podía haberle tocado un pequeño texto en el suplemento cultural, escrito por un recién llegado que como editor ocupaba la última mesita de la reacción.
Hoy que el tema está reactivado, creo que en buena medida, la reacción tuvo que ver con mención a don Eugenio Garza Sada quien, por lo que veo, seguirá levantando reacciones, a veces desproporcionadas.


lunes, 16 de septiembre de 2019

El primer Grito de Independencia de Andrés Manuel López Obrador

Andrés Manuel es un buen político, excelente orador, pero como comunicador es extraordinario. Esos tres ingredientes estuvieron presentes en su intervención, quizá la más potente de simbolismo que tenemos los mexicanos, en la noche del Grito de Independencia. Los 20 vivas, el lugar, el momento, la fecha. Fueron sólo 2 minutos con 4 segundos. Y ahí subrayó su mensaje político, su visión de nación y esos principios que cohesionan incluso las naciones que desean paz, concordia, respeto a sus raíces. Andrés Manuel es buen político, pero es un extraordinario comunicador, y como tal, supo tocar las fibras de nuestra mexicanidad y poner a más gente de su lado (¡¡¡¿¿¿mááááásss???!!) . Dos minutos con 4 segundos. Ya se discutirá y se escribirá mucho acerca de este Grito de Independencia. El de los Héroes Anónimos, el del Heroico Pueblo de México, el de las Comunidades Indígenas, el de la grandeza cultural de México... el de la Fraternidad Universal (ojo con los términos). Andrés Manuel es un extraordinario comunicador. ¿Y cuál fue el grito espontáneo de la gente?¿Qué le grito la gente al mandatario? Poderoso el mensaje de apoyo al presidente de México.


















domingo, 16 de junio de 2019

Lectores anónimos S. A.



Con mucha frecuencia reviso las estadísticas de este blog que escribo desde el 2004. Con una interrupción y cuenta nueva en el 2008.

Desde aquí comparto mis inquietudes, que como se ve están relacionadas con cuestiones de género, masculinidades, algunas incidencias del corazón, agradecimientos a la vida, literatura, entre otras cosillas.

Confieso que a veces me quema la intriga. ¿Quiénes me leerán?¿Será la persona a, b, o c, que conocí hace tiempo y que fue taaan importante en mi vida y que jamás volví a ver?¿Será alguno de mis amigos, amigas o conocidos de alguna parte?¿Alguna ex acaso?¿Algún exalumno(a)? ¿Será algún escritor o escritora?

Hay meses con pocas visitas, hay meses con muchas. El más alto fue marzo de 2016, que llegó a 7 mil 276 visitas, equivalente a 234 visitas diarias. ¿Quiénes eran esas personas? ¿Por qué regresaron las que volvieron?

Hay ratos que me quedo pensando en determinada persona ¿leerá tanta pendejada junta que pongo yo en este blog?¿Qué sentirá al saber de mí sólo por esta bitácora pública?

Son preguntas cuya respuesta nunca sabré. Son cuestiones similares a las que padece un libro, que una vez publicado no sabremos jamás su destino en el universo, ni mucho menos en la conciencia de una persona a la vuelta del mundo muchos años después del que un día nos despedimos. Gracias por leerme. Por guardarme un puntito en tu conciencia.

jueves, 13 de junio de 2019

Conflicto






El Conflicto es atrayente, rica comida chatarra. 
Se golosea entre dos. 
Si nos alejamos nos hace ojitos. 
Si falta Conflicto es lo más aburrido que existe, es tierra donde no pasa nada. 
Corbatas felices, nidos de esperanza. 
No florece nada bueno en la felicidad.
Salvo felicidad.

Pero ésa a quién le interesa.

domingo, 5 de mayo de 2019

Nuestros orígenes




Es muy fácil respetar incluso defender las ideas de la persona a quien se ama. Cada postura o filiación nació a partir de un vínculo afectivo. Es decir, de la calidad de un vínculo afectivo. Contamos gustosos la historia que nos enseñaron a contar.

jueves, 11 de abril de 2019

Mi maestro de la prepa

Las clases de Literatura de algún modo me marcaron. Como sucede en estos casos, la figura del maestro fue central. Mi profesor se caracterizaba por su excelente dicción que iba acorde con su atractiva personalidad. Al hacer cuentas, no pasaba de los 32 años y a veces nos contaba algunos pasajes de La Iliada. Era como esos actores veteranos que prescinden de aspavientos porque saben que con sólo la cadencia de la voz, la sonrisa o la pausa pueden lograr una atmósfera y una imagen. Cuando pasaba lista nombraba siempre el primer nombre y el primer apellido, con una pausa muy pequeña que subrayaba casi un deletreo de nombres. Tenía la imagen sobria de un exseminarista metido en un traje que lo hacía elegante, pero no altivo como a veces pasa a los abogados.
Movido por sus historias y acaso también por un sismo amoroso, escribí un cuento en cinco páginas —un capítulo por página, a lápiz— y se lo mostré. Días después le pregunté su opinión. "La idea funciona. Tiene algunos detalles pero la idea funciona". Sus palabras fueron muy importantes para mí, o mejor dicho, para el muchachito de 15 años que quería ser ingeniero y que estaba enamorado etcétera.
Al salir de la prepa lo busqué y le llevé mis escritos. Era secretario académico de la UR. A la segunda visita me canalizó (así como a los pacientes) a un taller que estaba por abrirse y que coordinarían Graciela España y Lalo Parra. Era 1990 y quería ser ingeniero.
Unos 25 años después, en el 2015, busqué a mi maestro por teléfono —yo vivía en Ensenada— y lo localicé en alguna dependencia del Tec de Monterrey. Quedé en enviarle pronto mi más reciente libro. Se acordó de mí y de que había seguido escribiendo, y eso me dio mucho gusto.
Ayer me enteré que mi maestro Arturo Torres falleció hace algunos meses. He estado buscando información y veo que en todo este tiempo hizo una trayectoria muy consistente en el ámbito de la educación (desarrollo curricular).
Yo nomás pienso en que fue mi maestro y un día me dijo que la idea de un cuento mío, funcionaba. Sus clases, sus palabras, fueron importantes para mí y siempre lo tuve presente. ¿Por qué a uno le da por llorar aun y cuando todo fueron buenos recuerdos?

lunes, 1 de abril de 2019

¿Las denuncias de abuso pueden caer en abuso?



Las redes sociales, ya lo sabemos, son un arma de doble filo. Un mismo fenómeno, con una nítida intención suele desvirtuarse en el camino. El #metooha tenido efectos positivos al visibilizar conductas ilícitas y criminales que muchas padecieron y que pocas manifestaron. Está muy bien que se alerte a todo el mundo que fulano y mengano es un acosador peeero, a la luz de las insituciones, si no hay denuncia, todo queda en el desprestigio del supuesto abusador, en el castigo social, que con el tiempo se sabrá hasta dónde fue justo y hasta dónde arbitrario. A partir de hoy la discusión tomará una ruta alterna que exige de la audiencia más atención y debilita la fuerza con la que una supuesta víctima de acoso puede exponer una situación de abuso. Los pasos de esta narrativa los veo del siguiente modo:
1) La supuesta víctima manifiesta los acosos y abusos de los que ha sido víctima en un pasado reciente o desde hace años. Es un acto catártico, liberador.
2) El ejemplo convence a otras víctimas a exponer su caso. Hay mucha empatía con marchas, firmas, aprobación. Me parece que hay más víctimas que se quedaron calladas, pero que aplauden la iniciativa.
3) Algunos de los acusados se defienden públicamente y dan sus razones. Sus posturas, "pruebas", declaraciones, tesimonios suenan con frecuencia, razonables, otros simplemente crean duda.
4) Existe un ejemplo contundente, o varios, que pone en entredicho la veracidad de las acusaciones. De este modo se debilita, en ciertos puntos la credibilidad del acto de denunciar en redes.
5) El rechazo a las acusaciones supuestamente falsas origina, o anuncia originar, un acto profundamente dramático y de gran impacto en redes (un suicidio anunciado, por ejemplo).
6) La agenda cambia y dejan de ser los abusos no denunciados en miles de víctimas, sino los riesgos que implica hacer una acusación falsa a una persona inocente. Ese el el entendido en el discurso, no estoy proclamando la inocencia o culpabilidad de una persona pública.
Respeto y lamento la decisión de Armando Vega-Gil de quitarse la vida. De buena fe se puede creer que las causas son las que él anuncia. ¿Cuál queremos que sea entonces la discusión? ¿Los abusos que no han tenido castigo?¿La importancia de denunciar?¿El riesgo de realizar acusaciones falsas o sin pruebas? Pensemos en esto y sigamos denunciando, sólo que observemos las consecuencias que alguien puede decir que sufre con esto.
Mis condolencias a la familia del músico mexicano, parte de Botellita de Jerez.

#armandovegagil #botellitadejerez #metoo

viernes, 29 de marzo de 2019

Género y discurso: Sobre esto hablamos




De qué hablan:

Ellas: de algo que cuidar.

Ellos: de algo que demostrar.

domingo, 10 de marzo de 2019

Carta a un bribón




Sé que le habría gustado tenerte para ella sola. Para que te empacharas de su belleza pero que te quedaras, en ese compromiso privado o público que algunos llaman fidelidad y otros matrimonio. Pero de eso tú, nada. La querías, sí. La retenías cuando se quería ir. Pero querías su manjar a cambio de poco. No la querías para siempre, sino para la noche de hoy que se ha repetido muchas otras, pero muchas veces no significa para siempre.

Te atrae porque es inteligente, es guapa y con ella platicas de un montón de cosas que te gustan. Además, porque a la hora de coger le pone muchas ganas, come con tanta hambre que, como dicen ama como si matara y ahí acaba tu vida a la orilla de un precipicio. Luego cada quien a su casa o los sábados pueden amanecer juntos.

Durante la primera época salían, se veían. Cuando le propusiste ir a la cama ella sabía que no buscabas compromiso. Pero bueno, es que ya sabías que le gustabas, que le movías el tapete y claro te lo digo, desde hace años tienes el encanto del muchacho que se lleva todo a la boca, es decir, que no tardas 30 minutos para que te toquen el brazo dobladas de la risa y tú les digas frases como

"ya deberíamos estar platicando en otro lado ¿no crees?"

 o, en un tono pícaro pero espontáneo:

"¿qué va a pasar con nosotros?".

Sabes que quien no da compromiso debe dar buen sexo.

No sé por qué te estoy escribiendo todo esto. Si hemos sido amigos debí suponer que te la habrías cruzado. No es gratuito, ahora lo sé, que desde hace tiempo se niegue a verte.

Y es que Andrea y yo tenemos un tiempo conociéndonos y habíamos hecho planes de algo más serio.

Y ahora me he quedado pensando, Mariano, en el mohíno vínculo que nos hermana.



sábado, 2 de marzo de 2019

¿Anomalía? —un sondeo—



Tengo una pregunta cuya respuesta me gustaría construir mediante una investigación, en este caso, por medio de una suerte de encuesta entre los que leen estas líneas. Incluso deseo saber si la pregunta puede deshacerse debido a un error en la premisa implícita o a causa de estar cayendo en ese error de razonamiento llamado petición de principio.

La pregunta es la siguiente.

¿Por qué razón el hecho de que una persona ejerza su sexualidad con las parejas que desee está más asociado a un periodo anómalo, una actividad transitoria irregular en las mujeres y casi nunca en los varones?

Agradezco sus opiniones y comentarios, así sean anónimas.

lunes, 11 de febrero de 2019

Y sí se casó



Hace muchos años tuve un compañero de trabajo que también era mi amigo. Éramos inquietos y algo bohemios. De él me agradaba lo que escribía y su sentido del humor. Mi amigo era algo tímido y en general me agradaba su amistad, platicar con él. Cuando coincidimos en aquel trabajo tenía ya años de saber de su existencia y más adelante, de tratarlo.

En aquella chamba teníamos una jefa. Una mujer en sus cuarenta pero con una trayectoria de al parecer más de 20 años en su área. Mujer independiente que se sabía atractiva. Muy profesional ella.

Un día, por aquellos años, mi amigo anunció que se casaría. Esto que sigue me lo contó él en tiempos recientes. Me dijo que nuestra jefa lo cuestionó acerca de su razón para casarse y le hizo el comentario de que no lo hiciera, asumiendo que sería, supongo por lo que ella interpretaba de la forma de actuar de mi amigo, un matrimonio de muy corta duración. Y para qué hacer la maldá. Esa charla de recomendación para mí reveló más de ella que de él. Pero el caso es que mi amigo contrajo matrimonio en una fecha que aún recuerdo con exactitud.

También en ese tiempo, cuando se casaron, mi amigo no había tenido antes pareja que yo conociera ni tenía mucha estabilidad en lo laboral —poco después de aquel trabajo lo despidieron— y no tenía, claro, según mi opinión, mucho carácter para insistir por un buen trabajo. Quizá nuestra jefa hizo aquella sugerencia porque lo veía bohemio pero en edad de corregir el camino o al menos no hacer un cagadero. En fin. El caso es que se casaron.

Lo que son las cosas. Mi amigo tiene casi 15 años de casado y ambos tienen una niña muy hermosa. Tiene la forma de cara de él, pero unos ojazos claros. Es como su papá nomás que en bonito. Se ve que se adoran y me gusta verlo cuidarla, jugar sus juegos, leerle, comentar sus anécdotas con ella. Supongo que ninguna relación que valga la pena es fácil, pero mi amigo lleva muchos más años casado —y subrayo casado, no en unión libre— que la mayoría de la gente que conozco de mi época de juventud.

En esto de las parejas no se sabe, lo mejor es no hacerse expectativas de nadie y dedicarse cada quien a lo suyo. Aunque ya no tengo trato con él, me da mucho gusto que mi compa haya formado una familia y que sigan juntos.
 

viernes, 11 de enero de 2019

La palabra desabasto




El discurso es la bisagra entre el mundo de las ideas y la realidad social. El uso de la palabra "desabasto" implica una deficiencia de quien se supone debe abastecer. El 4 de enero se robaron 36 pipas mientras que 25 días antes el robo ascendía a más de mil pipas diarias, una reducción del 96% (según datos dados a conocer en la conferencia del viernes 5 de enero). Utilizar la palabra "huachicoleo" y "robo", implicaría que hay un agente que comete un ilícito y por ende una parte afectada. Nada de eso aparece en el discurso noticioso. En cambio "desabasto" implica que no se está ofreciendo un producto necesario. Se introduce la idea que hay una deficiencia. Y pareciera que la causa es una deficiencia en la cabeza responsable. No hay desabasto sino que el flujo ilicito se está colapsando. Mientras los gasolineros se deciden a comprar combustible legal —y que se les ofrezca sin chantaje— los consumidores padecen las consecuencias, haciendo creer que hubiera escasez del hidrocarburo. No hay desabasto, hay chantaje porque se está terminando el negocio ilegal.

Las ruedas de prensa


La herramienta de la rueda de prensa dentro del ejercicio periodístico se ha ido desgastando. Uno de los objetivos de esta práctica es que todos los medios registrados tuvieran acceso a la misma información dada por la fuente, sin dar preferencia a ninguno. En muchas ocasiones la parte convocante —casi siempre funcionario público— hacía declaraciones sobre un tema concreto y de gran interés regional o nacional y evitaba contestar preguntas —es decir, la comunicación iba en un sólo sentido y los medios escuchaban y registraban. El trabajo del reportero,que cuestionaba con inteligencia, datos —y casi siempre valentía— fue una labor encomiable pero también un tanto anónima. La nota de ocho, como bien anota Daniel Salinas Basave en sus libros y lo sabe todo periodista —principalmente diarista— dura sólo unas horas. Luego queda en el olvido. Con el tiempo la rueda de prensa se fue convirtiendo en buena medida en una ceremonia que "obligaba" a los reporteros a ser cubierta, en gran medida para que el medio que representa "hiciera acto de presencia". Al día siguiente, y como no todos los medios pesan lo mismo ni tienen el mismo impacto, la medición del efecto de la rueda se volvía muy relativo. Como sabemos, la información más valiosa, las notas más contundentes nacen de la investigación del reportero y casi nunca de una rueda donde el convocante informa sólo lo que desea comunicar en favor de la institución que representa.
Las ruedas se fueron adormeciendo, hay letargo, adormecimiento. Los informes de Andrés Manuel cada mañana echa agua fría a esa olvidada costumbre de preguntar con libertad e inteligencia. También es cierto que bien podría no asistir ningún reportero y de todas formas la información llegaría por redes a más personas que el número de periódicos que se venden en este país. Sin embargo, el espacio no deja de ser una oportunidad para, sin coerción, apelar, inquirir, hacerle señalamientos al presidente de la república. Algo que ninguno sabíamos que podría suceder.
Me llama la atención que hasta ahora ningún reportero haya hecho quedar en mal al presidente, al contrario, parece que esas sesiones le sirven al tabasqueño para extenderse, detallar, repetir mucho de lo que ya ha mencionado. Como si aún estuviera en campaña y de algún modo lo está. Los reporteros no pueden dejar de asistir pero tampoco parece que se lleven ninguna exclusiva o información que yo no me entere cada día antes de las 8 de la mañana. Pero les paso un recomendación a los medios: Dentro de ese aletargamiento lleven a un periodista de mucha visibilidad que les jale el reflector y modifique, aunque sea un poco, el guion al que Andrés Manuel nos tiene acostumbrados. Los reporteros, especialmente los más jóvenes,
por sí solos difícilmente van a meter en aprietos a un político que se ha enfrentado a la represión policial, política y mediática desde hace décadas y que luego se convierte en presidente. Sean más creativos, por favor.