Nombrar es presentar, es mostrar. A
veces es invocar. Las palabras se van llenando de significados como
un barco carguero que recorre varios puertos, y al enseñar su
bandera se alude lo hay en su interior.
Nos quedamos con las formas más
expresivas sobre las planas, las más sonoras sobre las quietas, las
que imprimen más fuerza psíquica en el oyente, sobre las que pueden
pasar desapercibidas.
En todo caso, buscamos la eufonía, las
palabras que arropen y den cuerpo, las que evoquen. Si le digo a
usted patria, reforma, votación, ve llegar un barco lleno de
algarabía.
Ahora bien, en un cajón dedicado a los
nombres están los que damos a las personas, o mejor, que se dan las
personas a sí mismas. Y así como los productos se vuelven una marca
reconocible, así los nombres circulan mejor cuando se vuelven
también una marca.
Hay una costumbre lingüística en no
llamar a las personas por su nombre, sino por su “marca”. Y para
que dé en el blanco debe ser distintiva pero fácil de recordar.
¿Se ha fijado usted cómo se presentan
ciertas personas?
A veces en el interior de ese barco hay
una orquesta que toca fanfarrias, a veces su bandera es breve pero
eficaz. Como el escritor cuyo segundo apellido fue Lozano, pero que
siempre usó sólo el primero: Octavio Paz.
Llamo segundoapellidismo al afán
legítimo que las personas procuran para realzar, recordar o
distinguir un nombre basándose en su apellido materno. Esta
habilidad es especialmente desarrollada por personas que desenvuelven
en algún ámbito de la vida pública como las artes, los medios de
comunicación, cantantes, escritores, políticos.
El segundoapellidismo requiere que el
primer apellido sea más bien común y el segundo sea escaso y de
preferencia llamativo . Así, el segundo se vale del primero para
sostenerse, completarse, brillar en la noche del directorio. Yo le
llamo mercadotecnia de los nombres.
Hay dos variantes: la de ambos
apellidos unidos, y donde sólo aparece el segundo.
Entre los primeros que me vienen a la
memoria están: González Iñárritu, López Dóriga, Sánchez
Azuara, Flores Caballero, Vázquez Mota, López Obrador, Villarreal
Landeros, Gutiérrez de Alba, Rodríguez Platas.
Entre los que se decidieron por el
segundo están: Miguel González Bosé, Pablo Ruiz Picaso, Joaquín
Martínez Sabina, entre muchos.
Y usted ¿cómo se hace llamar? ¿le
gustan sus dos apellidos juntos? Estoy seguro que la opción que
eligió es la que mejor se escucha.
yadivia@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Te agradezco el tiempo que te tomas para dejar un comentario. Mi correo es yadivia@hotmail.com