Las buenas historias deben entretener,
pero también se agradece si aportan algo al entendimiento y a la
comprensión del mundo, y una parte del mundo se llama Baja
California.
Los libros de historia están llenos de
fechas, guerras y lugares; hechos gloriosos algunos, o batallas,
sangre de mártires y fundaciones. Esos libros tratan de explicar y
registrar los hechos presuntamente más importantes. Pero ¿quién
definió qué es lo más importante? ¿Puede ser digna de contar, más
allá del entretenimiento, una historia de amor que sea la saga
familiar que incluya amores desiguales, traicionados e impetuosos?
Cómo se pasa la vida es
la más reciente obra de María Eugenia Bonifaz de Novelo,
escritora de larga trayectoria y que aborda lo mismo la historia que
el tema de las mujeres en la sociedad. Y estas dos líneas las
podemos encontrar en la novela que se presentará este martes 27 de
agosto del 2013 a las 19:00 horas en el Cearte de Ensenada, BC.
—En su novela hay elementos
históricos principalmente relacionados con Baja California en el
siglo XX, pero la mayor parte transcurre en ámbitos asociados a las
relaciones amorosas y familiares. Pareciera que las mujeres de su
novela buscan en el amor y la familia la realización personal. ¿Será
la suya una novela de amor?
Efectivamente, es principalmente una
novela de amor, desde los abuelos hasta Claudia y Marina. Amores
sólidos, amores impetuosos, amores desiguales, traicionados, amores
decepcionantes (Marina)...
Siento que la mujer busca su
realización personal, en primer lugar, en el amor y la familia; ha
sido así desde el principio por muchas razones: la preservación de
la especie, el complemento emocional y afectivo que da la unión con
el hombre, incluso, factores económicos influyen en muchos casos.
Ahora bien, existe sin duda una
inclinación en ella para realizarse también en infinidad de maneras
y hoy, por fortuna, lo está logrando ya que hasta mediados del
siglo XX esto era una rareza, para nosotras
las oportunidades estaban sumamente limitadas y hasta prohibidas.
Gracias a Dios las mujeres se han educado, se atreven a abrir un
negocio, a participar en la vida comunitaria, las cosas han cambiado.
—Me
llamó la atención que no deja fuera las desigualdades sociales
representadas por la explotación de los mineros y la forma en que
vivía la gente pudiente de la época. En ese aspecto ¿hubo pasajes
o elementos que debió de dejar fuera por cuestión de espacio o
cualquier otro motivo?
Las
desigualdades que siempre existen en todo lugar y en toda época las
expresé en personajes como Chorín, quien recogía los desechos de
las leltrinas, en Chuy que vivía en una cueva, pero con dignidad, y
en el cuento de Pedro el Minero.
—¿Cómo
definiría la mirada de los personajes femeninos, especialmente la de
Claudia, que es el eje de la historia?
Serena y penetrante.
—¿Qué eventos provocaron que
fuera el poblado de Santa Rosalía el principal escenario? ¿Por qué
la escogió?
Porque me pareció un lugar muy
interesante dado su azaroso desarrollo, la diversidad de sus
pobladores y las circunstancias galo-mexicanas que le dieron una
personalidad tan especial.
—Podría hablar un poco de la
protagonista, Claudia de Eguía Ulloa. ¿Nació aproximadamente en
1932? Pareciera que porta la esencia familiar y a la vez es su
historiadora.
Sí, nació precisamente en 1932 y en
ella confluyen las corrientes de un abuelo español: imaginativo, y
una abuela mulegina, no menos recia; así como los maternos: osados
y, aunque ausentes, siempre en contacto. Sus padres, más serenos, le
brindan la estabilidad necesaria para formar su carácter. Hereda la
afición por escribir de un abuelo, la fortaleza de las abuelas y la
visión de la historia que tenía el abuelo materno quien legó los
libros que su madre llevó consigo a Santa Rosalía y de contenido
histórico. Recordará usted cómo le iba describiendo los pasos de
los primeros exploradores a su recién desposada cuando hicieron su
luna de miel por el Pacífico.
—¿Qué espera de un lector de
esta novela?¿qué le gustaría provocar en él?
Que conozca un poco más de la saga
californiana, desde los misioneros, colonos militares y civiles de
excepcional reciedumbre que a través del tiempo lograron sobrevivir
en condiciones muy adversas, y que esto provoque admiración que
provenga del conocimiento. Y como lo expresé en la dedicatoria, que
valoremos más la labor de los mineros. Como todo trabajo de ficción,
espero que también entretenga, a menos por un rato, al que lo tenga
en sus manos.
—¿Qué es el amor para
Marina?¿le tiene miedo y se hace la valiente?¿de dónde proviene
cierta "amargura"?
Un anhelo insatisfecho. No, no tiene
miedo, ella es valiente. Desgraciadamente no tuvo suerte, como tantas
en la vida real. Al no encontrarlo, es natural que surja la amargura.
yadivia@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Te agradezco el tiempo que te tomas para dejar un comentario. Mi correo es yadivia@hotmail.com