domingo, 30 de agosto de 2009

Es correcto

Me dan ganas de defenestrar a esas personas, por lo general sonriendo sin motivo en un puesto de atención al público, que en lugar de contestarte afirmativamente, su retraso mental los hace contestarte con un "es correcto". Así contestan los pendejos: Es correcto. Chale.

¡Mesero!

sábado, 29 de agosto de 2009

Las mujeres y los hombres

Somos distintos, funcionamos distinto. Un ejemplo con algo que me es bastante evidente.

Una mujer procura terminar su chamba en los tiempos dedicados para ello, para así no tener que ocuparse tiempo extra y tener oportunidad de estar con los suyos o reservarse el espacio para otras cosas.

Algunos batos procuran juntarse o casarse para no tener que ocuparse tiempo extra en asuntos domésticos, y reservarse este espacio para algo bastante redituable emocional y económicamente: trabajar. Despúes de todo, aunque al final terminen ellos haciendo cosas en la casa, por lo general son ellas las que dirigen las labores arriando al personal para que finalmente las haga.

A las chavas les es más engorroso que para los hombres tratar un asunto de trabajo, en el fin de semana, por ejemplo. Esas cosas de trabajo se tienen que hacer, pero rara vez alimentan las fibras emotivas de una chava.

Muchos hombres cuando llegan a casa sienten que ya trabajaron, que ya no tienen por qué ocuparse ni preocuparse si ya concluyeron con sus responsabilidades. Después de todo a la casa se va a descansar ¿no?

Bueno, eso he visto.

Los traductores

Me parece que los poetas son como los chef, que le platicas más o menos cómo es un sabor, y él te puede hacer un platillo con los ingredientes que tú le platicaste. Quizá exagero, pero sí, tiene que ver con una suerte de traducción o bien, con la materialización de una idea o concepto. Creo que en general así trabajan los artistas. Artistas, no los hartistas, esos son otra cosa, jejeje.

jueves, 27 de agosto de 2009

Pero me entendiste ¿no?

Por un lado existen muchas hablas (idiolectos, creo que les dicen) en los diversos grupos sociales de una misma ciudad incluso. Ahí se utilizan expresiones, giros que quizá fuera de ellos no se entenderían o se entenderían a medias.

“Mi amigo fue al centro y compró unos tramos y dos limas”, sería una expresión de este tipo. Hasta ahí, funciona, quizá para un grupo, pero no basta con que el lenguaje funcione. Porque una cosa es usar unas palabras por otras, y otra, pensar que un uso o sentido es correcto cuando no lo es, por ejemplo cuando dicen, para subrayar que algo es justamente como se afirma, “te lo prometo”, en lugar de “te lo juro”.

Sigo pensando que la educación formal está a punto de fracasar en este campo de la lecto-escritura. El hecho que las nuevas generaciones escriban con muy elocuentes consonantes que balbucean no me parece en sí grave, es curioso, funciona, lo que me parece lamentable es que esos futuros abogados, arquitectos, médicos, contadores, que recibieron por años una educación “de calidad”, no lleguen con las herramientas necesarias cuando deseen redactar un documento, un simple recado.

Saboreo el habla cotidiana, sé que los medios digitales tienen mucho que ver en estos cambios de expresión. Pero si los medios electrónicos no siguieran diciendo “tráfico” (¿hay agentes de tráfico?), en vez de “tránsito”, “en base a” en lugar de “con base en”, el catatónico “accesar” en lugar de “acceder”, quizá usáramos mejor y más ampliamente nuestro idioma. Claro que los medios influyen, y muchas veces para mal.

Me gusta mucho la plasticidad que tiene el lenguaje hablado, observo con gusto todos estos giros, me gusta ver cosas nuevas y cómo cambia, salirme de mi mundito y escuchar otras voces; eso me parece que de alguna manera enriquece, con lo que no estoy de acuerdo es con que estos argumentos que Pedro maneja sirvan para no interesarse en el idioma ni en si existe o no una forma correcta, que al cabo si funciona podemos decir las cosas casi de cualquier manera.

martes, 25 de agosto de 2009

Margarito Cuéllar, en Guadalajara



Estábamos chupando muy a gusto cuando nos cayó la invitación para la lectura de Margarito Cuéllar mañana miércoles en Guadalajara. Se me hace que no vamos a poder ir así de pronto. Pero el que le quiera caer, será en la Capilla Elías Nandino del ex convento del Carmen. Av. Juárez 638, zona centro, Guadalajara, Jal. Entrada libre. 8:30 pm.





Y a todo esto, ¿saben quién es ese tal Margarito Cuéllar, que nomás en las cantinas del primer cuadro lo conocemos? En todos lados lo conocen, pero como le pasa a Fito Páez, luego no saben quién es.

Vean el dato:


Es poeta, narrador y periodista originario de San Luis Potosí, México. Estudió periodismo y una maestría en artes en la Universidad Autónoma de Nuevo León. Ha obtenido dos premios nacionales de poesía y uno de cuento. En 2003 obtuvo el premio de Poesía otorgado por Radio Francia Internacional. Premio a las Artes 1995 por la Universidad Autónoma de Nuevo León por trayectoria en las áreas de poesía y ensayo.
Sus libros de poemas más recientes son Estas calles de abril / Saga del Inmigrante, Aldus / Universidad Autónoma de Nuevo León, 2008. Arresto domiciliario, Punta Umbría, España, 2007) y Noticias de ninguna Parte, Conarte / Ayuntamiento de Santa Catarina, México, 2007. Autor del libro de cuentos Los riesgos del placer.
Ha sido becario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Nuevo León en el área de letras (1998); beneficiario del Programa de Apoyo y Fomento a Coinversiones Artísticas y Culturales del Fonca (1998-1999 y 2003-2004) y del Programa de Residencias Artísticas México-Colombia (1998-1999).

lunes, 24 de agosto de 2009

El amor y la casa

Leí que los corazones grandes se llenan con poco. Y las casitas tan chiquitas que están vendiendo hoy en día, qué, ¿se llenan con poquito amor?
"Si el amor falta, la casa está vacía", Ezra Pound.

El cine

Esos cinéfilos empedernidos, la mayoría en el fondo son almas muy solitarias.

Ley seca

La gente es tan apolítica, que deja sin sentido a la Ley Seca, que se implementa en periodos electorales para evitar problemas más graves a causa del alcohol. Pero a la vez es tan apasionada de su equipo de futbol, que si se implementara la Ley Seca en los estadios para evitar actos de violencia, como actualmente sucede, dejaría sin sentido la finalidad del futbol, que es hacer negocio con la venta de cerveza.
Sobres, carnal.