lunes, 1 de febrero de 2016

Retroalimentación

La escritora Concepción Perea menciona que unos cuantos amigos para ella son imprescindibles a la hora de escribir. Dice que a ellos, personas de toda su confianza, les muestra su trabajo antes de publicarlo y ellos son tan hijos de puta como para decirle crudamente lo que no sirve, pero también la quieren lo suficiente como para interesarse en que su texto mejore. A mí me pasa eso ahora, cuando me señalan mis deficiencias me siento como en los tiempos del taller literario, cuando a un cuento o a un poema le ponían mil "peros". 
Creo que es muy bueno que te señalen los fallos de tu texto, arde, pero es muy bueno.

2 comentarios:

  1. Es cierto. Es mucho mejor así. cuando das a leer y se quedan callados es el problema.

    ResponderEliminar
  2. Gracias por comentar. Estoy de acuerdo, a veces el silencio es como un muro. Aunque duela, pero que te digan algo. Claro, las cosas de quien vienen.

    ResponderEliminar

Te agradezco el tiempo que te tomas para dejar un comentario. Mi correo es yadivia@hotmail.com